Los días 29 y 30 de Septiembre se realizó en nuestra ciudad el curso para los trabajadores no docentes de la provincia de Buenos Aires y de la Ciudad Autonoma de Buenos Aires sobre “Bioseguridad y reisgo en laboratorios”. El curso se va repitiendo a lo largo de todo el país organizado por el CETUN, el Centro de Estudios y Capacitación dependiente de la FATUN, y en cada lugar se convoca entre los charlistas a distintos representantes de las comisiones de seguridad que se han ido conformando en las UUNN desde la tragedia de Río Cuarto, que costara en el 2007 la vida a 6 personas y por el que se hayan procesadas cinco autoridades de aquella universidad. Además se dio espacio a representantes de la Superintendencia de Riesgos del Trabajo y de una empresa de gases envasados.

Asistieron un centenar de técnicos no docentes de toda la provincia y de la CABA, y no faltó el intercambio de experiencias durante los descansos. El contenido técnico de las charlas es siempre bienvenido para los compañeros, más aún dada la total ausencia de los cursos de capacitación que son una obligación de la parte empleadora. Durante el desenvolvimiento del curso se vio que -aún siendo señalado como de “Capacitación Sindical”- el objetivo de ambos días de charlas fue el de incentivar en los compañeros el interés por la puesta en pie de la CCyMAT (Comisión/Comité de Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo), estipulado en el CCT y que genera un ámbito de discusión paritaria entre el gremio y las autoridades universitarias en lo que respecta al establecimiento y control de pautas de seguridad. ¿Es esto malo en sí mismo? No. Siempre y cuando se tenga en cuenta que órganos de ese estilo existen en forma generalizada en otros ámbitos laborales sea esto en los servicios o en la industria, al ser ocupados por personas designadas por las distintas burocracias sindicales, poco idóneas, las cuales con tal de no confrontar con los intereses de los empleadores, terminan siendo co-responsables de muertes de trabajadores por dejar pasar faltas graves a las medidas de seguridad en pos de maximizar la producción.

Por eso no fue para nada llamativo que en la mesa de apertura del curso, estuviera junto a los secretarios generales de distintos gremios (incluido Cadierno de ATULP) la mísmisima contadora y paritaria estrella del CIN, Mercedes Molteni. Pero no contentos con eso, los organizadores se dieron el lujo de invitar al actual Presidente de la UNLP, Gustavo Aspiazu, a quien no dudaron en homenajear entregándole, debidamente enmarcada, el acta en la que se lo aceptó como afiliado de ATULP durante su tránsito por las planillas de liquidación no docentes. Todo esto bajo el cuadro del Semilla Ramirez...

¿Así nos preparamos para plantarnos frente a las autoridades, para exigir que de una vez por todas la seguridad y la salubridad pasen a ser un derecho de los compañeros y de todos los que circulan por la Universidad? ¿Es que ya nos olvidamos de las asambleas que hubo que levantar en varias facultades para conquistar nuestro derecho a no ser expuestos a la pandemia de la gripe A, cuando las autoridades sólo eximían de concurrir a estudiantes y docentes?

Desde El Frente denunciamos a quienes “dejan al zorro en el gallinero” en un tema tan delicado como éste y llamamos a debatir en cada facultad la necesidad de organizarse en forma totalmente independiente de las autoridades, poniendo la integridad física de los compañeros como prioridad impostergable, y no como materia de discursos que sirvan para sellar pactos de ocasión entre autoridades y supuestos representantes.

Nicolas Bueno
Tec. de Laboratorio
Fac. Cs. Exactas