El lunes por la noche, las/os docentes nos enteramos por televisión y en la voz del gobernador Scioli −una vez más− del bochornoso acuerdo del Frente Gremial con el gobierno. El mismo consiste en la “abultada” suma de 107 $ al básico, lo implica un aumento de bolsillo del 8 %. Muy lejos del 20-24% que ellos mismos levantaban.
Roberto Baradel (Sec.Gral SUTEBA) quiere disfrazar la negociación a nuestras espaldas con la famosa “consulta” que “bajará a las escuelas”, cuando ya todos sabemos que el acuerdo de paz social está firmado y que Baradel- Petroccini han pactado con Scioli- Oporto “el normal dictado de clases de acá a fin de año”. Todo esto a costa de un aumento de miseria y en medio de la intención gubernamental de quedarse con el IPS (Instituto de Previsión Social) para manotear los fondos de los trabajadores estatales activos y jubilados.
En cuanto se conoció el acuerdo, la bronca recorrió las escuelas, y un amplio sector que se expresó en las asambleas llamó al rechazo y a continuar con el plan de lucha. Son nueve las seccionales, además de varios distritos autoconvocados, las que están llevando adelante un paro de 48 horas.
Es que nadie puede ocultar que nuestro salario y el de todos los estatales está en franco deterioro, licuado por una inflación real del 30%. Los docentes de todo el país están cansados de pelear siempre para que nuestro sueldo apenas roce la línea de pobreza.
Y mientras Cristina Kirchner anuncia, feliz, el pago por adelantado al Club de París y arregla cuentas por el mundo, en varias provincias como Mendoza, Santa Fe, La Rioja, Entre Ríos, Chubut y Capital los docentes continúan la lucha por aumento salarial y en contra de la carestía de la vida. Eso sí, la CTERA se llama a silencio de radio, respetando en forma muy prolija los lazos que mantiene con el gobierno.
Nuestra propuesta: por un plan de lucha unificado
Ante esta situación, desde la Corriente Nacional 9 de Abril planteamos que es más necesario que nunca la unificación de las luchas, fortalecer la de cada provincia con el apoyo de los docentes de todo el país. Y exigir un plan de lucha nacional de la CTERA, por un salario igual a la canasta familiar, por la triplicación del presupuesto educativo en base al no pago de la deuda externa, por el quite de subsidios a la educación privada − que consume el 13, 5 % de los recursos estatales, aproximadamente 24.500 millones de pesos, de lo cual una gran parte va destinado a la educación religiosa−, por la defensa de nuestra jubilación, por un plan integral de refacción de escuelas controlado por los docentes, los padres y los estudiantes y por el pago de las becas, entre otros puntos.
Para esto es necesario convocar un encuentro o plenario nacional de delegados, afiliados y no afiliados para discutir de conjunto qué plan de lucha necesitamos. Pero sabemos que la dirección del gremio (Lista Celeste) no lo va a hacer. Por eso hay que impulsar un polo combativo que se ponga a la cabeza de las tareas planteadas. Las seccionales de oposición tienen que ponerse a la altura de las circunstancias y tomar la responsabilidad de organizar la bronca y el rechazo a este acuerdo fraudulento.
Para la semana que viene ya está convocado un plenario provincial de la oposición. Todas las seccionales que siguen luchando y los compañeros autoconvocados de los distritos donde dirige la Lista Celeste tienen que participar para lograr que esta instancia sea el puntapié inicial y un primer paso para una coordinación real con el resto de las provincias y con los demás estatales. Hay que hacer asambleas y reuniones en todas las escuelas de la provincia, para llevar mandatos al plenario, votar democráticamente un verdadero plan de lucha y organizar a la oposición provincial.
LVO